El queso manchego es uno de esos productos de Castilla y La Mancha que nadie quiere echar a perder cuando lo tenemos en casa. Por eso, es normal que te preguntes cómo puedes conservarlo durante mucho tiempo sin arriesgar a que se pierda el sabor. Mira estos trucos.

Condiciones perfectas para mantener el queso manchego.

Por lo general, lo más apropiado es que el queso manchego esté conservado a una temperatura que se encuentre entre los 5 y los 10 grados centígrados. Eso sí, no te olvides de la humedad: lo ideal es que dejes el producto en un lugar donde haya un 90% en total.

Si no puedes mantener el queso manchego a una humedad tan alta, que sepas que no podrás conservar su sabor auténtico a menos del 85%. Ahora veamos cuáles son las diferencias de conservación en caso de que tengas el queso manchego en trozos o en una pieza entera.

1. Si tienes la pieza entera de queso manchego.

Si te encuentras en la situación de que tienes una pieza entera de queso manchego en casa y no tienes ni idea de cómo conservarla sin que se eche a perder toda ella, debes saber que en la mayoría de los casos la parte baja del frigorífico es el mejor lugar para guardar el queso.

Es decir, coloca la pieza entera de queso manchego en uno de los cajones inferiores del frigorífico donde sueles meter la fruta y la verdura. Solamente en esta zona del frigorífico es donde conseguirás conservar el producto durante varios meses, para seguir disfrutando de él.

Ahora bien, ten en cuenta que esta norma se aplica si tienes el queso manchego envasado al vacío. En los casos en que ya has empezado a comer y no lo tienes envasado al vacío, debes envolverlo en papel film o en papel encerado. Luego, mételo en el mismo lugar del frigorífico.

Si al final te decantas por envolver el queso con papel de aluminio, también puedes hacerlo, pero en este caso solamente necesitas tapar la parte donde has cortado el queso. Te decimos esto porque la parte de la corteza tiene que estar aireada para que se siga oxigenando.

1. Si tienes el queso manchego dividido en trocitos.

También puede darse el caso de que tengas el queso manchego partido en cuñas, algo especialmente común cuando prefieres optar por la comodidad de no tener que cortarlo cada vez que quieras degustar el producto. No te preocupes, aquí también hay un truco.

Para conservar el queso manchego en casa en trozos, es importante seguir estos pasos:

1. Envuelve el queso en papel de aluminio o film para protegerlo del aire y la humedad.
2. Guarda el queso en el cajón de las verduras o en la parte más fría de la nevera, donde la temperatura sea constante y no haya cambios bruscos.
3. Si el queso es muy grande, córtalo en porciones todavía más pequeñas.
4. Retira la parte que veas que se ha secado del queso manchego.
5. No dejes el queso manchego expuesto al aire durante mucho tiempo.

Con estos consejos, el queso manchego se conservará en buen estado en casa. Si lo prefieres, también puedes guardar el producto en un recipiente hermético o en un plato que esté cubierto con un paño húmedo. Eso sí, ten en cuenta que depende de cuánto tardes en comerlo.

¿Cómo se conserva el queso manchego en aceite?

Si eres todo un pro del queso manchego y te encantaría mantenerlo en las condiciones óptimas para conservarlo con toda la textura y el sabor intensificados en casa, entonces tienes que conocer el truco de conservar el queso manchego en aceite. ¡Es una técnica bastante popular!

La maduración en aceite exige tener preparado un tarro o recipiente de vidrio donde puedas ir metiendo los trocitos de queso, que también pueden dividirse en cuartos. Te recomendamos estos recipientes porque ayudarán a que no moleste el fuerte olor ni se transfiera el sabor.

A partir de aquí, simplemente mete los trozos de queso y vierte aceite de oliva virgen extra hasta los topes, de tal manera que tengas el queso bañado en el líquido. Una vez hayas tapado los tarros, busca un lugar donde puedas guardarlos. Tiene que ser fresco y estar a 10ºC.

Ya verás cómo, cuando destapes los tarros y pruebes el queso, notarás un sabor intenso al aceite de oliva que conseguirá realzar todavía más el sabor ya intenso y único del queso manchego. De ahí que sea tan importante mantener los recipientes bien cerrados.

Ya conoces todas las claves y trucos para conservar el queso manchego en las mejores condiciones dentro de tu casa. Tanto si eres todo un quesero como si solo quieres disfrutar de este manjar en ocasiones especiales, este artículo te ayudará a mantener el sabor diez.